pez rigido ima komomo sf-125

Desde su introducción como el primer señuelo IMA, más de 50.000 unidades han sido comercializadas. Es un verdadero “killer“ navegando a escasos 4 dedos de la superficie. Su apariencia es la de un pez pasto y su construcción interna, con las bolas de tugsteno deslizándose en su interior le hacen funcionar como una flecha debajo del agua. Cuando cae sobre la superficie, se coloca en posición vertical, en el momento de la recuperación, las bolas se reposicionan en el centro de gravedad de manera que si paramos, se queda en posición horizontal. La forma ideal de utilizarlo si las condiciones del agua lo permiten es con recuperaciones lentas. El Komomo tenderá a hacer continuas pausas si le dejamos, imitando comida facil en las horas má scalmadas y serenas de la jornada. Si lo recuperamos de forma agresiva y rápida, este tiende a describir amplios arcos durante su recuperación. Su tecnología interna y la ausencia de babero le permiten ser lanzado a distancias extraordinarias.